Mi Luna impaciente y tu noche van a huir,
con sus perfectos errores y su tibia
desnudez, con su voz tranquila que se calla al mentir. Van insinuando bailes, van
matando los porqués. Nada rompe el silencio como un beso y
una flor, como tus
brazos, tus piernas y dormir en el jardín. Me dedico a tu espalda sin percibir mí alrededor,
te leo libro abierto del principio
hasta el fin. Tu verdadero nombre no lo puedo recordar,
no me reconozco pero sé muy bien quién
soy. Si no tengo
memoria no te la puedo regalar, el mañana es sombra, el fin del mundo es hoy.
Todo existe pero todo es ilusión
en un destino tan feroz.
Descubriste sin salida el callejón, hoy
tu nombre está en mi voz. ¿Qué le hiciste a las ventanas y a la luz? Voy cayendo en espiral.
No temiste al Big Joe’s dirty blues,
ni al engaño universal.
¿No sentiste? El enigma se cayó, guardamos la culpa en el baúl. Todo es triste al saber que se acabó mucho antes del azul.
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